¿Qué es la dependencia emocional? 7 síntomas frecuentes

¿Alguna vez te ha pasado que no eres capaz de vivir sin una persona? ¿Te has sentido en algún momento dependiente de alguien? Por supuesto, cuando somos pequeños dependemos de nuestros padres a muchos niveles. Por ejemplo, a nivel económico, a nivel social o a nivel emocional. Sin embargo, de adultos y en la adolescencia podemos sentir que dependemos de otras personas y que somos incapaces de estar sin ellas. Te contamos qué es la dependencia emocional y te damos 7 síntomas frecuentes en la dependencia emocional, para que puedas identificarla.

1. ¿Qué es la dependencia emocional?

La dependencia es un rasgo de la personalidad que podemos observar en diferentes ámbitos de nuestra vida. No es una característica que se tenga o no se tenga, sino que va en un continuo, de manera que podemos decir que somos más o menos dependientes, o más o menos independientes. Todos dependemos en mayor o menor medida de los demás para satisfacer determinadas necesidades. Ahora que sabes qué es la dependencia emocional tienes que saber que constituye un problema cuando aparece de manera muy intensa o si nos damos cuenta de que impide avanzar en nuestra vida.

Una dependencia aparece cuando necesitamos que otra persona satisfaga una necesidad nuestra. En el caso de la dependencia emocional, la necesidad satisfecha es emocional, de afecto o cariño, que buscamos en otra persona porque nos sentimos incapaces de obtenerlo de nosotros mismos. De repente nos damos cuenta de que nuestra felicidad, nuestra alegría y, sobre todo, nuestra autoestima depende de la presencia de una persona externa concreta, que puede ser alguno de nuestros padres, nuestra pareja o un buen amigo.

Este tipo de dependencia emocional nos hace pensar que para poder ser nosotros mismos y estar bien necesitamos que esté la otra persona. Así, cuando la sentimos lejos de nosotros, física o emocionalmente, nos viene un fuerte sentimiento de vacío acompañado de mucho dolor. Para paliar este dolor, iniciamos un patrón de conductas obsesivas hacia esa persona, parecidas a las observadas en la drogadicción. En este artículo, además de profundizar sobre qué es la dependencia emocional, nos centraremos en la dependencia en la pareja, pero se puede encontrar en otro tipo de relaciones.

2. 7 Síntomas de la dependencia emocional

Cuando somos personas dependientes emocionalmente nuestro bienestar depende de una persona que no somos nosotros mismos, por lo que aparecen conductas similares a las observadas en la drogodependencia. Sin embargo, al tratarse de una persona, nos encontramos además de esas, otros 7 síntomas dela dependencia emocional que nos indican que podría haber un problema:

  1. Miedo irracional a la pérdida de esa persona. Debido a que nuestro bienestar y nuestra autoestima dependen de la presencia de otra persona, tenemos un inmenso miedo a perderla. La pérdida del vínculo significa la pérdida de ese afecto y cariño sin los que “no podemos vivir”.
  2. Obsesión por esa persona. El miedo a la pérdida de dicho vínculo, que se produce en la dependencia emocional, genera que nos obsesionemos por esa persona, que la persigamos en redes sociales y que pensemos que “sin ella no podemos vivir”.
  3. Idealización de esa persona. Como nuestras necesidades emocionales dependen de esa persona, tendemos a idealizarla y pasar por alto numerosas conductas negativas. En este sentido, puede aparecer un maltrato psicológico o físico, por ejemplo.
  4. Tendencia a complacer a esa persona. Para evitar perder el vínculo, tendemos a complacer a esa persona en todo momento. Todo aquello que necesite, lo hacemos, aunque no estemos de acuerdo.
  5. Tendencia a evitar el conflicto. El conflicto puede ser visto como un peligro para el vínculo, por lo que tenderemos a evitarlo si padecemos de dependencia emocional elevada. Está relacionado también con la complacencia al otro, ya que si no hay conflicto muchas veces terminamos “dando nuestro brazo a torcer” y cediendo para complacer al otro. “Qué más da, si lo importante es que estemos bien”.
  6. Tendencia a valorar las propias necesidades como poco importantes. Está muy relacionado con lo anterior. Al no haber conflicto, no peleamos por nuestras necesidades y damos las del otro como más válidas. Al final terminamos cediendo para no generar malestar en el otro.
  7. Necesidad de muestras de afecto continuo. Para sentirse segura en la relación, la persona dependiente emocional necesita que le demuestren continuamente que le quieren. Si la pareja no se lo demuestra, sentirá que el vínculo se está rompiendo, aunque no haya pruebas reales de esto.

3. Causas y consecuencias de la dependencia emocional

3.1 Causas de la dependencia emocional

La dependencia emocional se origina sobre todo en la infancia  y en la adolescencia, aunque hay otras posibles causas.

  • Apego en la infancia: En la infancia aparecen los patrones de apego a una figura que nos da seguridad, que suele ser uno o los dos padres. Si nuestra figura de apego no nos ofrece una visión del mundo como un lugar seguro en el que podemos vivir y ser autosuficientes, pueden generarnos un apego dependiente. Este apego aparece sobre todo en familias que han hiperprotegido a sus hijos, sin enseñarles cómo manejar sus propias emociones “negativas”. Sin embargo, se ha observado que la dependencia emocional aparece también cuando las figuras de apego han sido más evitativas, es decir, no han sabido satisfacer las necesidades afectivas del niño. De tal forma, que la persona termina buscando en otras personas satisfacer dichas necesidades.
dependencia emocional infancia
  • Aprendizajes de la adolescencia: En la adolescencia aprendemos poco a poco cómo son las relaciones de pareja. Mediante nuestras propias experiencias, aprendizaje vicario (observación de otras personas) y mediante los mensajes que nos da la sociedad, vamos formulando en nuestra cabeza la estructura del mundo que nos rodea. Con las relaciones pasa lo mismo y, en este sentido, experiencias amorosas en las que nos entregamos de manera incondicional puede predecir una dependencia emocional. Además, los mitos sobre el amor romántico que nos da la sociedad a través de la cultura (películas, series, canciones, libros…) no ayudan, ya que tienden a idealizarlo.
  • Baja autoestima: Una baja autoestima produce que necesitemos que otra persona nos acepte para poder aceptarnos a nosotros mismos. En este sentido, la otra persona satisface nuestra necesidad de autovalidación, ya que nosotros no nos sentimos capaces de hacerlo.
  • Miedo a la soledad: El miedo a la soledad provoca que busquemos incesantemente a alguien para no estar solos. No importa que la persona no sea la adecuada o que incluso nos esté maltratando de alguna manera, ya que mejor estar con alguien que vivir solos.

3.2 Consecuencias de la dependencia emocional

Una elevada dependencia emocional elevada nos puede generar mucho sufrimiento en las relaciones de pareja.

  • Permisividad del maltrato dentro de la relación: Debido al miedo de romper el vínculo, no se ponen los límites pertinentes ante formas de actuar por parte de la pareja. Mejor soportar ese maltrato que la idea de perder a la persona o la culpabilidad que supondría abandonarla.
  • Pérdida de autoestima: Debido a que ponemos nuestras necesidades por debajo de las del otro, nuestra autoestima va quedando en un segundo plano. No defender nuestros sentimientos provoca que les quitemos cada vez más importancia y que nos valoremos de manera más negativa.
  • Conductas adictivas hacia la otra persona: Necesidad de tener presente siempre a la otra persona. Mantenerla controlada en todo momento, saber dónde está, qué hace. Necesitamos que nos escriba a cada rato y si tarda en contestarnos, nos ponemos nerviosos (como cuando un drogadicto lleva horas sin consumir). Controlamos, en este sentido, las últimas conexiones del WhatsApp, o vigilamos las veces que se conecta al Instagram. Lo necesitamos.
conductas dependencia emocional
  • Altruismo patológico: Tendencia a satisfacer las necesidades de los demás por encima de nuestras posibilidades, e incluso, por encima de las nuestras propias. Empezamos a dejar de hacer cosas para nosotros mismos y centramos esas energías en satisfacer a nuestra pareja.
  • Pérdida de amistades y de apoyos sociales: La persona dependiente se encierra mucho en la relación de pareja y, con el objetivo de que esta sea satisfactoria, termina por dejar otras relaciones de lado.

4. ¿Qué hacer si tienes dependencia emocional?

4.1 Soluciones de la dependencia emocional

Ahora que sabes qué es la dependencia emocional y sus síntomas, es momento de conocer algunas claves para solucionar dicha dependencia. Pero primero debemos identificarla y reconocer que somos dependientes emocionalmente de una persona.

Una de las cosas que hemos visto que más afectan a la dependencia emocional es la autoestima, por lo que mejorar la autoestima será primordial para dejar de ser dependientes emocionalmente. Si aprendemos a validarnos nosotros mismos, no dependeremos de alguien para hacerlo. Esto es, darnos la validez que tenemos como personas, ya que todos somos igual de válidos. Así también podemos recuperar nuestra dignidad, en caso de sentir que la hemos perdido.

Por otro lado, reconocer los patrones de apego que tenemos y resolverlos de una manera que nos genere menos ansiedad. Así, también podemos aprender otra manera más sana de relacionarnos con los demás, sin generar dependencias, ni relaciones de abuso-sumisión.

Si crees que necesitas ayuda para superar una dependencia emocional, que te está generando malestar psicológico, no dudes en contactar con nuestro gabinete psicológico en Madrid psicolivepsicologos.com.

Una dependencia aparece cuando necesitamos que otra persona satisfaga una necesidad nuestra. En el caso de la dependencia emocional, la necesidad satisfecha es emocional, de afecto o cariño, que buscamos en otra persona porque nos sentimos incapaces de obtenerlo de nosotros mismos. De repente nos damos cuenta de que nuestra felicidad, nuestra alegría y, sobre todo, nuestra autoestima depende de la presencia de una persona externa concreta, que puede ser alguno de nuestros padres, nuestra pareja o un buen amigo.

Para solucionar una dependencia emocional, debemos:

  1. Mejorar la autoestima será primordial para dejar de ser dependientes emocionalmente.
  2. Aprender a validarnos nosotros mismos.
  3. Reconocer los patrones de apego.
  4. Aprender otra manera más sana de relacionarnos con los demás
  5. Contactar con un profesional.

Este tipo de dependencia emocional nos hace pensar que para poder ser nosotros mismos y estar bien necesitamos que esté la otra persona. Así, cuando la sentimos lejos de nosotros, física o emocionalmente, nos viene un fuerte sentimiento de vacío acompañado de mucho dolor. Para paliar este dolor, iniciamos un patrón de conductas obsesivas hacia esa persona, parecidas a las observadas en la drogadicción.

  • Apego en la infancia:
    • Apego dependiente (Este apego aparece sobre todo en familias que han hiperprotegido a sus hijos, sin enseñarles cómo manejar sus propias emociones “negativas”).
    • Las figuras de apego han sido más evitativas, no han sabido satisfacer las necesidades afectivas del niño. De tal forma, que la persona termina buscando en otras personas satisfacer dichas necesidades.
  • Aprendizajes de la adolescencia:
    • Mediante nuestras propias experiencias, aprendizaje vicario (observación de otras personas) y mediante los mensajes que nos da la sociedad,
    • Los mitos sobre el amor romántico que nos da la sociedad a través de la cultura (películas, series, canciones, libros…) no ayudan, ya que tienden a idealizarlo.
  • Baja autoestima: Una baja autoestima produce que necesitemos que otra persona nos acepte para poder aceptarnos a nosotros mismos.
  • Miedo a la soledad: El miedo a la soledad provoca que busquemos incesantemente a alguien para no estar solos.
  • Mejorar la autoestima será primordial para dejar de ser dependientes emocionalmente.
  • Reconocer los patrones de apego.
  • Aprender otra manera más sana de relacionarnos con los demás, sin generar dependencias, ni relaciones de abuso-sumisión.
Elena Cabeza de Vaca Iriarte

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *