Diferencia entre estrés y ansiedad: causas, consecuencias y consejos

¿Qué es el estrés y la ansiedad?

El estrés es la activación fisiológica del cuerpo normal y adaptativa como reacción a un estímulo. Cuando percibimos la realidad, el cuerpo reacciona a ella con una respuesta de estrés, que puede ser más o menos intensa en función de lo que el organismo cree necesario. Por tanto, el estrés puede aparecer en situaciones desagradables (distrés) o en situaciones agradables o emocionantes (eustrés).

Imagínate que es tu cumpleaños y te han hecho una fiesta sorpresa que te hace mucha ilusión. ¿Cómo reacciona tu cuerpo? Seguramente, de la misma manera que ante un examen muy difícil: aumento del ritmo cardíaco y respiratorio, aumento de la presión muscular… La diferencia entre estas dos situaciones no radica, por tanto, en las sensaciones corporales, sino en la emoción que las acompaña. Mientras en la fiesta sientes euforia o alegría, en el examen sientes ansiedad o miedo.

La ansiedad, por tanto, es una emoción normal y adaptativa que aparece ante una situación que consideramos que en futuro (cercano o lejano) podría suponer un peligro. Esta emoción activa la respuesta de estrés para permitirnos enfrentarnos a esa situación. Ahora te puedes hacer una mejor idea sobre la diferencia entre estrés y ansiedad, pero te vamos a contar todos los detalles.

diferencia entre estrés y ansiedad

¿Cuál es la diferencia entre el estrés y ansiedad?

La diferencia entre el estrés y la ansiedad es fácil de reconocer una vez están bien definidos. El estrés es la respuesta que da el cuerpo de manera casi automática a un estímulo determinado. La ansiedad es una emoción que puede actuar como dicho estímulo y activar la respuesta de estrés pese a no haber aparecido todavía un estímulo real (por ejemplo, un examen).

Ambas dos son adaptativas y normales. ¿Qué quiere decir esto? Muy sencillo, nos ayudan a sobrevivir en nuestra sociedad y son necesarias para nuestra supervivencia. Por tanto, no debemos tratar de no sentirlas, ya que su objetivo no es hacernos sufrir, pese a que sean desagradables.

¿Qué causa el estrés y la ansiedad?

El estrés y la ansiedad, como reacciones normales, aparecen ante un estímulo determinado. En el caso del estrés, este estímulo es cualquier situación, pensamiento o emoción que precisa de una activación corporal para hacerle frente. Mientras, en la ansiedad, la causa puede ser cualquier situación que nos provoca una preocupación hacia el futuro, por ejemplo la ansiedad anticipatoria. También se puede dar hacia algo que ya ha pasado, pero no nos preocupa el hecho en sí, sino las consecuencias futuras.

Sin embargo, tanto el estrés como la ansiedad pueden aparecer de manera «patológica». Esto es, cuando se dan en una situación o con una intensidad en las que no nos resultan de utilidad. Las causas pueden ser, en este caso variadas:

  • Genética: se ha observado una predisposición genética que podría hacer a la persona algo más sensible a la ansiedad y al estrés. Esto provocaría un aumento de la intensidad de los síntomas.
  • Aprendizajes: A lo largo de nuestra vida hemos podido aprender a darle mucha importancia a determinados estímulos que no la tienen. Por ejemplo, las personas muy perfeccionistas, que sienten una fuerte ansiedad cuando no está todo como a ellos les gustaría, podrían haber tenido unos padres muy exigentes. En el pasado, esta ansiedad podría haber resultado útil, pero ahora se vuelve en su contra.
  • Situaciones extremas: Lamentablemente, muchas personas han sufrido abusos o acoso en su infancia y en su vida adulta. Estas situaciones podrían haber generado un trauma y, como consecuencia, la persona está más alerta de lo normal a los estímulos del medio ambiente. Esto produce que se active la respuesta de estrés o incluso una respuesta de ansiedad ante estímulos que en condiciones normales no lo harían.
qué es estrés

Consecuencias del estrés y la ansiedad

Pese a ser reacciones normales, mantener durante largos periodos de tiempo una alta activación puede tener consecuencias nocivas para el cuerpo. En este sentido, mantener una situación de estrés o de ansiedad, o si estos son muy intensos podremos ver las siguientes consecuencias:

  • A nivel físico: Mantener un estado elevado de estrés o ansiedad podría hacer aparecer diferentes dolencias, como dolor de cabeza o de estómago. La actividad del sistema inmune disminuye, haciéndonos más vulnerables a virus y bacterias del entorno. El sistema digestivo también funciona peor, por lo que podría haber estreñimiento, diarreas o ambas. El estrés y la ansiedad provocan mucha tensión muscular, al activar el cuerpo para luchar o huir de la situación, esto provocaría diferentes dolores musculares (espalda, brazos, piernas…) o, incluso, podemos notar cosquilleo o como si se «nos durmieran».
  • A nivel cerebral: El estrés y la ansiedad provocan un aumento del nivel de cortisol en sangre. El cortisol es una sustancia que activa el sistema adrenal para producir la famosa adrenalina, que nos ayuda a enfrentarnos a situaciones de peligro. Sin embargo, en dosis altas, el cortisol es perjudicial para el cerebro. Esto provoca que disminuya nuestra memoria, nuestra atención, concentración y nuestra capacidad de toma de decisiones.
  • A nivel emocional: Un elevado estrés o una elevada ansiedad pueden producir otras emociones, como desmotivación, desgana, falta de energía… También puede haber otras reacciones emocionales como reacción de la activación, como rabia o irascibilidad.
  • A nivel conductual: El síntoma conductual principal de la ansiedad y el estrés es la evitación. La persona que la padece tiende a dejar de hacer aquello que le produce ansiedad o estrés. Así, hay personas que dejan de estudiar, salir con los amigos e incluso dejan de salir de casa.
  • A nivel cognitivo: En el estrés hay menos síntomas cognitivos, aunque podría haber preocupaciones por nuestro estado de salud. En la ansiedad, por el contrario, las preocupaciones son el síntoma principal. Siempre va a aparecer una preocupación hacia algo. Lo que dirán o pensarán sobre nosotros. Lo que pasará si suspendemos una asignatura.

¿Cómo prevenir la ansiedad y el estrés?

Para prevenir que la ansiedad y/o el estrés se vuelvan un problema es recomendable:

  • Cuidarse: Comer de una manera saludable, hacer deporte de manera regular sin que sea excesivo y dormir las horas que el cuerpo necesita.
  • Prevenir el estrés: Para prevenir el estrés puede ayudarnos organizar mejor nuestras rutinas y nuestro trabajo, aprender a pedir ayuda cuando lo necesitamos y delegar algunas tareas en otras personas.
  • Prevenir la ansiedad: Para prevenir que la ansiedad se vuelva patológica, podemos hacer dos cosas:
    • Escuchar a la emoción: qué me está preocupando, por qué, qué temo que pase. Si no escuchamos a nuestras emociones, estas tienden a intensificarse.
    • No dejar que nos frene: Como hemos dicho anteriormente, la ansiedad hace que tendamos a la evitación de situaciones. Si dejamos que esto nos frene, aprendemos que efectivamente es una situación temible y la próxima vez que aparezca nos dará mucha más ansiedad. Además, puede generalizarse a situaciones similares.
qué es ansiedad

¿Cómo combatir el estrés y la ansiedad? Consejos

Cuando el estrés o la ansiedad ya son muy elevados podemos hacer algunas cosas para combatirlos:

  • Cómo combatir el estrés: Para combatir el estrés, sobre todo si es continuo, por ejemplo en el trabajo, debemos desconectar de esto que nos produce tanto estrés. El estrés continuo trae consigo síntomas de cansancio y desmotivación y debemos escucharlo, porque nos puede estar indicando el inicio de un problema mayor. Irse de vacaciones o pasar un fin de semana sin tocar cosas del trabajo o la universidad pueden ser de ayuda.
  • Cómo combatir la ansiedad: Para combatir la ansiedad, sobre todo si es muy intensa, debemos hacer dos cosas:
    • Primero, podemos utilizar alguna estrategia de relajación centrándonos en el presente. La respiración puede ser muy eficaz.
    • Segundo, debemos ver qué es aquello que nos preocupa tanto y qué podemos hacer para resolverlo.

Ya conoces la diferencia entre estrés y ansiedad. si crees que necesitas ayuda para combatir el estrés y/o la ansiedad, no dudes en contactarnos. En nuestro centro encontrarás un equipo de psicólogos expertos en ansiedad en psicolivepsicologos.com que sabrán acompañarte y guiarte, dándote las herramientas necesarias para gestionar la ansiedad.

El estrés es la activación fisiológica del cuerpo normal y adaptativa como reacción a un estímulo

La ansiedad es una emoción normal y adaptativa que aparece ante una situación que consideramos que en futuro (cercano o lejano) podría suponer un peligro.

El estrés es la respuesta que da el cuerpo de manera casi automática a un estímulo determinado. La ansiedad es una emoción que puede actuar como dicho estímulo y activar la respuesta de estrés pese a no haber aparecido todavía un estímulo real (por ejemplo, un examen).

El estrés y la ansiedad, como reacciones normales, aparecen ante un estímulo determinado. En el caso del estrés, este estímulo es cualquier situación, pensamiento o emoción que precisa de una activación corporal para hacerle frente. Mientras, en la ansiedad, la causa puede ser cualquier situación que nos provoca una preocupación hacia el futuro.

  • Cuidarse: Comer de una manera saludable, hacer deporte regularmente y dormir las horas que el cuerpo necesita.
  • Prevenir el estrés: organizar mejor nuestras rutinas y nuestro trabajo, aprender a pedir ayuda y delegar algunas tareas en otras personas.
  • Prevenir la ansiedad: Para prevenir que la ansiedad se vuelva patológica, podemos hacer dos cosas:
    • Escuchar a la emoción: qué me está preocupando
    • No dejar que nos frene: Si dejamos que nos frene, aprendemos que efectivamente es una situación temible y la próxima vez que aparezca nos dará mucha más ansiedad.
  • Cómo combatir el estrés: Para combatir el estrés, debemos desconectar de esto que nos produce tanto estrés.
  • Cómo combatir la ansiedad: Para combatir la ansiedad, debemos hacer dos cosas:
    • Primero, podemos utilizar alguna estrategia de relajación centrándonos en el presente. La respiración puede ser muy eficaz.
    • Segundo, debemos ver qué es aquello que nos preocupa tanto y qué podemos hacer para resolverlo.
Elena Cabeza de Vaca Iriarte

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